El déficit de taurina puede potenciar el envejecimiento, según un nuevo estudio que ha evaluado el efecto del aminoácido en la salud y en la longevidad en varios modelos de animales. Según los autores, al revertir la pérdida de taurina asociada con la edad mediante suplementos se alargó la vida en condiciones sanas de gusanos, roedores y primates no humanos, lo que garantiza que se realicen más pruebas humanas para examinar los efectos de la taurina para alargar la vida humana en condiciones sanas y los posibles riesgos que conlleva. La taurina –un micronutriente semiesencial– es uno de los aminoácidos más abundantes en los animales. Estudios previos en varias especies indican que el déficit de taurina durante la edad temprana causa trastornos funcionales en el sistema musculoesquelético, ocular y nervioso que están relacionados con alteraciones asociadas al envejecimiento. Pequeñas pruebas clínicas de suplementos de taurina sugieren beneficios en enfermedades metabólicas e inflamatorias, pero la influencia de concentraciones de la taurina en la salud y longevidad animal aún no se conoce bien. Para comprender mejor si la abundancia de taurina influye en el alargamiento de la vida saludable y cómo lo hace, Parminder Singh y sus colegas miden las concentraciones de taurina en la sangre en distintas edades en ratones, monos y humanos. Singh et al. descubrieron que en monos de 15 años, las concentraciones de taurina sérica eran un 85 % inferiores que en monos de 5 años. Igualmente, los niveles de taurina disminuyeron más de un 80 % en toda la vida humana. También se observó la disminución de niveles de taurina en ratones ancianos. Los autores comprobaron que los ratones con falta del transportador de taurina importante vivían menos años en la edad adulta. Si se revertía esta disminución con suplementos de taurina, aumentaba la longevidad media de gusanos y ratones en un 10-23 % y un 10-12 %, respectivamente. En especial en los ratones, la taurina administrada oralmente con 500 y 1 000 miligramos por kilogramo de peso corporal al día también se asoció con mejoras en resistencia, coordinación y funciones cognitivas y ralentizó varios marcadores clave de envejecimiento, como la senectud celular, el daño mitocondrial y del ADN y el envejecimiento por inflamación. Además, Singh et al. también indican que el suplemento de taurina en macacos Rhesus afectaba positivamente a la salud ósea, metabólica e inmunológica.
Aunque los autores observan que revertir el déficit de taurina durante el envejecimiento muestra el potencial como una estrategia antienvejecimiento prometedora, se necesitan más pruebas clínicas humanas e investigación para ver si el suplemento de taurina aumenta la longevidad saludable en humanos. En un artículo de Perspective, Joseph McGaunn y Joseph Baur indican que, aunque se han observado algunos riesgos con el suplemento de taurina, el potencial de riesgos aún merece consideración, porque faltan ensayos de seguridad en humanos a largo plazo, y las dosis equivalentes utilizadas en el estudio de Singh et al. serían muy elevadas en humanos. “Por lo tanto, como sucede con cualquier intervención, el suplemento de taurina para mejorar la salud y longevidad humanas debe abordarse con precaución”, escriben McGuann y Baur.
Journal
Science
Article Title
Taurine deficiency as a driver of aging
Article Publication Date
9-Jun-2023