CATA-Earth, educación universitaria para hacer frente a los retos del cambio climático y la crisis ambiental global en el sudeste asiático
En el proyecto, un Erasmus+ financiado e impulsado por la UE, participan dos universidades europeas, la de Utrecht y la UOC, y cuatro de la región Asia-Pacífico
Universitat Oberta de Catalunya (UOC)
El sudeste asiático es una de las regiones del mundo más vulnerables a los efectos del cambio climático. La subida del nivel del mar, la intensificación de las olas de calor y de los desastres naturales, como lluvias torrenciales, ciclones o inundaciones, ponen en peligro la vida de la población, provocan enfermedades y contribuyen a que miles de personas tengan que migrar. Es por esto por lo que es necesario y urgente que las poblaciones locales de los países afectados estén formadas en salud planetaria, un concepto que hace referencia a la relación entre la salud humana y las disrupciones del medio ambiente provocadas por la acción antropocéntrica.
Este es, precisamente, el objetivo que persigue CATA-Earth (Catalysing Transformative Change in Planetary Health Education), un proyecto Erasmus+ impulsado y financiado por la Unión Europea en el que participan seis universidades de los Países Bajos, España, Bangladés e Indonesia, así como cuatro organizaciones locales de la región Asia-Pacífico.
La idea surge del centro holandés UMC Utrecht, que contacta con la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), una de las pioneras en investigación y docencia de salud planetaria a escala internacional, para desarrollar el proyecto para estas regiones de forma innovadora y contextualizada a la situación de la región. La UOC es la única universidad española que participa en el proyecto.
“El objetivo es que cualquier persona, en cualquier parte del mundo, pueda tomar el paquete y el repositorio de herramientas y recursos que elaboraremos, y crear un curso sobre salud planetaria”
Educación en salud planetaria
CATA-Earth, que se inició en enero del 2024 y tendrá una duración de 36 meses, tiene como objetivo promover capacidad para diseñar e implementar educación en salud planetaria innovadora cocreada con la comunidad en regiones de Asia vulnerables al cambio climático; asimismo, se quiere forjar una nueva generación de profesionales con conocimientos y capacidades en salud planetaria.
En concreto, el proyecto pretende establecer un marco de trabajo en educación en salud planetaria y una recopilación de recursos que guiarán la puesta en marcha de cuatro cursos acreditados en salud planetaria, dos en universidades de Indonesia y otros dos en universidades de Bangladés, y un curso abierto masivo o MOOC. Todos los cursos incorporarán las prioridades de los estudiantes, iniciativas y proyectos locales, así como la voz de las comunidades de cada región. "Los cursos estarán alineados con los retos ambientales de cada lugar", destaca Ariadna Moreno, mánager del proyecto de la UOC.
Así, por un lado, el proyecto integrará los currículums de formación superior en educación en salud planetaria en los grados que se consideran adecuados, teniendo en cuenta el contexto de necesidades y posibles barreras de cada comunidad. Y, por otro, se busca capacitar a los educadores, tanto en las comunidades como en el profesorado, en metodologías de aprendizaje en salud planetaria.
En total, se impartirán cursos a un mínimo de ochenta alumnos mientras dure el proyecto y se ofrecerá formación a cuarenta profesores y profesoras, así como a líderes comunitarios que serán los encargados de desplegar el currículum en salud planetaria en diferentes áreas.
Con todos los recursos que se generen durante el proyecto se elaborará una guía de creación e implementación de los cursos pensada para que pueda ser de utilidad a comunidades de otras regiones. "El objetivo final es que cualquier persona en cualquier zona del mundo pueda coger el kit y el repositorio de herramientas y recursos, y crear un curso basado en estos materiales", señala Moreno.
Basado en la cocreación
Uno de los rasgos identitarios del proyecto CATA-Earth es que incorpora a la comunidad local en todo el proceso de creación e implementación de los contenidos. "Muchas veces se tratan los retos tanto globales como locales sin adaptarlos al contexto de las comunidades que los experimentan. Nosotros queríamos transcender los límites académicos y, precisamente, incluir a la sociedad dentro del proceso porque, al final, son las comunidades las que sufren las consecuencias del cambio climático", afirma Cristina O'Callaghan, investigadora principal del grupo de investigación BITAL - Barcelona Interdisciplinary Research Group on Planetary Health, de los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC y codirectora del máster universitario UOC-UPF-ISGlobal de Salud Planetaria.
Por este motivo, se implementaron desde el primer momento estrategias de cocreación con actores de la comunidad para identificar, ante todo, los retos de las comunidades locales. "El hecho de incluir todas las opiniones y perspectivas a través de procesos de cocreación aporta mucho valor, porque les da voz", considera Carme Carrion, investigadora del eHealth Lab de la UOC, que también participa en el proyecto. El grupo de la UOC se completa con la experta en procesos de aprendizaje transformador en educación ambiental, Isabel Ruiz Mallen, profesora de los Estudios de Psicología y Ciencias de la Educación e investigadora del Laboratorio de Transformación Urbana y Cambio Global (Turba Lab) del IN3.
"En Europa disponemos de mucha formación sobre salud planetaria, pero nos retroalimentamos. En cambio, el hecho de poder estar en estas comunidades e intercambiar conocimiento es un activo muy valioso para el proyecto", coinciden en señalar O'Callaghan, Carrion y Moreno.
De izquierda a derecha, el equipo de la UOC: Ariadna Moreno, Carme Carrion, Isabel Ruiz Mallen, Cristina O'Callaghan
La voz local
El proyecto está organizado en seis paquetes de trabajo, en cada uno de los cuales siempre hay una universidad europea que trabaja con una universidad de la región Asia-Pacífico y una comunidad local. El primer paquete se centra en establecer el marco educativo en salud planetaria; el segundo, en poner en práctica cursos de esta temática en los diferentes currículums; el tercero trata sobre la formación de los educadores; el cuarto generará un repositorio de todos los materiales desarrollados; el quinto tiene que ver con la propia gestión del proyecto, y, finalmente, el sexto está relacionado con la comunicación y difusión de los resultados. La UOC participa activamente en el primero y el tercero de estos paquetes, junto con la Universidad de Indonesia y la Universidad Gadjah Mada, ambas de Indonesia.
"Hemos desarrollado el marco formativo para salud planetaria contextualizado, es decir, teniendo en cuenta el contexto de las comunidades locales. Para ello, pasamos el verano pasado en Yakarta trabajando con grupos locales", explica Moreno. Asimismo, añade, "la UOC está desarrollando las metodologías de aprendizaje destinadas a formar a los profesionales de los países de la región".
"Por ejemplo, uno de los componentes que no habíamos previsto y que surgió durante las sesiones de cocreación que desarrollamos fue el de la espiritualidad. Desde la perspectiva occidental, no lo habíamos contemplado", señala O'Callaghan, que recalca que es crucial adaptar los estudios al componente sociocultural de cada región.
Además de la UOC y la UMC Utrecht, participan la Asian University for Women y la Noakhali Science and Technology University, de Bangladés, y también la Universidad de Indonesia y la Universidad Gadjah Mada, ambas de Indonesia.
Este proyecto favorece los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de las Naciones Unidas: 3, Salud y bienestar; 4, Educación de calidad; 5, Igualdad de género; 11, Comunidades y ciudades sostenibles, y 13, Acción por el clima.
Disclaimer: AAAS and EurekAlert! are not responsible for the accuracy of news releases posted to EurekAlert! by contributing institutions or for the use of any information through the EurekAlert system.