La reciente aprobación de aducanumab –un medicamento potencial para el tratamiento de la enfermedad de Alzheimer– por parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA) puede proporcionar una prueba de concepto que mejorable rápidamente, escribe Dennis Selkoe en este artículo de Perspective. También puede permitir tratamientos combinados, algo habitual en las enfermedades crónicas. "En terapéutica, como en la vida, uno debe caminar antes de poder correr", afirma el autor. Son pocos los ensayos recientes de agentes potencialmente modificadores de la enfermedad de Alzheimer (EA) que parecen haber cumplido sus criterios de valoración principales. La evidencia más clara de modificación de la enfermedad hasta ahora proviene de criterios de valoración de biomarcadores secundarios, principalmente una disminución sustancial de las placas amiloides en el cerebro en un plazo de 18 meses. Esto es lo que ocurrió en los dos ensayos de fase 3 de aducanumab, un anticuerpo monoclonal β-amiloide (Aβ) que fue aprobado por la FDA en junio de 2021. Esto generó cierta controversia. La controversia debe considerarse en el contexto de otros ensayos recientes de inmunoterapia para la EA, según afirma Selkoe, destacando otros 3 anticuerpos contra β-amiloide que han demostrado su capacidad para eliminar los depósitos de amiloide en el cerebro en ensayos de fase 2 o 3. Selkoe afirma que, en su conjunto, estos datos constituyen lo más cerca que se ha llegado a un enfoque de modificación de la enfermedad en el campo de la EA. Si bien los beneficios cognitivos de estos agentes potencialmente modificadores de la EA son modestos y todavía no se ha superado el reto de evaluar su significación clínica, este es un reto que ya se ha experimentado en otras enfermedades crónicas. "Para muchas enfermedades crónicas, los compuestos terapéuticos iniciales tienen una eficacia limitada y a menudo se sustituyen constantemente por medicamentos más eficaces... Conseguir experiencia en el mundo real con un primer tratamiento, aunque sea modesto, debería servir para fomentar el desarrollo de agentes de segunda generación más potentes", apunta Selkoe. El autor hace referencia a los retos para los médicos que consideren el uso de aducanumab en sus pacientes. También destaca el elevado precio de este medicamento. "Estos y otros desafíos en la vía para implementar el primer tratamiento terapéutico aprobado para la EA requieren cuidadosa planificación e ingenio", escribe Selkoe, "pero este no deja de ser el proceso que los pacientes y sus cuidadores llevan tanto tiempo esperando".
Journal
Science
Article Title
Treatments for Alzheimer’s disease emerge
Article Publication Date
6-Aug-2021