A nivel mundial, la frecuencia de eventos graves de blanqueo de coral se ha multiplicado por cinco en las últimas cuatro décadas, desde una vez cada 25 a 30 años a principios de la década de 1980 hasta una vez cada 5,9 años en 2016, según informa un nuevo estudio. El blanqueo de coral se produce cuando picos repentinos de temperatura tienen un efecto negativo sobre las algas que residen en los corales y que proporcionan nutrientes a estos organismos óseos en el contexto de una de una relación simbiótica. El blanqueo prolongado durante varios meses conduce a altos niveles de mortalidad del coral. Para comprender la evolución a lo largo del tiempo de los eventos de blanqueo, Terry Hughes et al. analizaron numerosos conjuntos de datos históricos que recogen eventos de blanqueamiento en 100 lugares de todo el mundo ocurridos entre 1980 y 2016. Los datos más recientes, de 2015 y 2016, revelan que más del 30 % de los episodios de blanqueamiento pueden describirse como "graves", extendiéndose a escalas de entre decenas y centenares de kilómetros. Cuando los investigadores observaron los cambios en las últimas décadas en la frecuencia de los episodios de blanqueo, descubrieron que el riesgo de estos eventos, y especialmente de casos graves, ha aumentado en aproximadamente un 4 % cada año desde 1980. Mientras que en un principio el Atlántico occidental comenzó a calentarse y a experimentar blanqueos con mayor frecuencia que otras regiones, el riesgo de eventos de blanqueo ha aumentado con el tiempo con mayor fuerza en Australasia y Oriente Medio. Los autores también señalan que, aunque los eventos de blanqueo tendían a producirse con mayor frecuencia cuando el ciclo global se volvía más cálido por causas naturales (El Niño), las tendencias de calentamiento general implican que los eventos de blanqueo se producen cada vez con mayor independencia de los ciclos naturales más cálidos o más fríos.
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