La tecnología puede estar sesgada y su diseño puede perjudicar a ciertos grupos demográficos. Si bien los esfuerzos para abordar el sesgo y promover la equidad en las tecnologías están creciendo rápidamente en una serie de disciplinas técnicas, Achuta Kadambi sostiene que no se está produciendo un crecimiento similar lo suficientemente rápido en la ingeniería médica. "Mientras que las compañías del ámbito informático están liquidando sistemas de reconocimiento facial lucrativos pero sesgados, los dispositivos médicos sesgados continúan vendiéndose como productos comerciales", escribe Kadambi en un artículo de Perspective. El sesgo en los dispositivos médicos da como resultado una variación de rendimiento no deseada entre diferentes grupos demográficos y puede influir en gran medida en la desigualdad sanitaria. Por ejemplo, se ha demostrado que los biosensores ópticos que usan luz para monitorizar signos vitales como la oxigenación de la sangre funcionan de manera diferente en pieles claras que en oscuras. Dado que algunas de estas mediciones se relacionan con lo que podrían ser pronósticos médicos graves, un dispositivo médico tan sesgado podría conducir a resultados de mortalidad dispares para pacientes de piel oscura o negra. El autor describe tres formas en que los dispositivos médicos pueden adolecer de sesgos: sesgos físicos, sesgos computacionales y sesgos interpretativos. Sin embargo, a diferencia de problemas similares a los que se enfrenta el sector informático, el sesgo en los dispositivos médicos con frecuencia no se aborda. Según Kadami, el sesgo se investiga de forma rutinaria y se aborda activamente en informática. Por ejemplo, Amazon Inc. ha prohibido recientemente el uso de sus productos de reconocimiento facial por parte de las fuerzas del orden hasta que los problemas de sesgo en el interior del software se puedan comprender y resolver por completo. Los ingenieros médicos podrían aprovechar las lecciones aprendidas de estas áreas para alcanzar la equidad en los dispositivos médicos y prevenir la desigualdad sanitaria. "Lograr la equidad en los dispositivos médicos es una pieza clave del rompecabezas, pero no deja de ser una pieza más", escribe Kadambi, señalando que alcanzar la verdadera igualdad va más allá de la mera ingeniería de dispositivos. "Incluso si se logra diseñar un dispositivo médico justo, este podría ser utilizado por un proveedor clínico con un sesgo consciente o subconsciente. E incluso un dispositivo médico justo desde una perspectiva de ingeniería podría ser inaccesible para una serie de grupos demográficos", afirma.
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