Un período de sequía severa cerca del final del primer milenio de nuestra era probablemente selló el destino de la sociedad maya clásica de las tierras bajas y un nuevo estudio revela hasta qué punto había llegado la sequía cuando las poblaciones de las tierras bajas mayas comenzaron a evaporarse. La caída de los antiguos mayas durante el período Clásico Terminal (800-1000 d. C.) es un ejemplo comúnmente utilizado sobre cómo ciertos cambios climáticos abruptos en el pasado contribuyeron al declive de las sociedades antiguas. Si bien los estudios paleoclimáticos de la región indican que el colapso del período Clásico maya tuvo lugar durante un período excepcionalmente seco, no ha quedado claro hasta qué punto llegó esta sequía. La mayoría de los datos climáticos se limitan a reconstrucciones cualitativas (por ejemplo, simplemente si un período fue más húmedo o más seco que otro). En este estudio, Nicholas Evans y sus colegas reconstruyeron la composición isotópica del agua del lago Chichancanab, en México, utilizando núcleos de sedimentos que contienen yeso precipitado. Midieron las composiciones triples de oxígeno e isótopos de hidrógeno en moléculas de agua incorporadas a la estructura cristalina del yeso, depositado en forma de capas en el fondo del lago, como indicador de la aridez del pasado. Los autores descubrieron que durante el período Clásico Terminal, la pluviosidad anual en las tierras bajas mayas se redujo en casi un 50 % de media y hasta en un 70 % durante las condiciones de máxima sequía. Además, los autores por primera vez pudieron medir una disminución de entre el 3 y el 8 % en la humedad relativa en comparación con la actualidad. Los resultados del estudio revelan la severidad y la duración de la sequía sufrida por la sociedad maya de las tierras bajas y aportan los datos cuantitativos necesarios para comprender mejor su impacto en los sistemas agrícolas y sociopolíticos mayas.
###
Journal
Science