Uno de los principales problemas del tratamiento dental son las diferencias individuales en la forma y la sección transversal del conducto radicular de los dientes. Al tratar los conductos radiculares, los médicos deben limpiar a fondo estos conductos, sellarlos y colocar materiales herméticos. El conocimiento de la anatomía del conducto radicular es fundamental en la primera etapa del tratamiento endodóntico. Unos odontólogos de RUDN University han estudiado en detalle cómo cambia la forma del conducto radicular en la raíz del diente y por primera vez propusieron su clasificación. Esto ayudará a odontólogos a evitar errores en el diagnóstico, seleccionar con mayor precisión los instrumentos necesarios y tratar a los pacientes de manera más eficiente. Los resultados fueron publicados en Applied Sciences.
El conducto radicular es el espacio dentro de la raíz del diente a través del cual pasan los vasos sanguíneos y los nervios. Los conductos radiculares pueden tener diferentes formas, pueden doblarse, estrecharse, y esto complica significativamente su tratamiento. Además, las curvas y los cambios de forma pueden darse en la corona dental, la que se puede ver, y en otras partes. Investigaciones previas se han enfocado en estudiar la curvatura del canal solo en la parte superior (corona) o en la parte más baja (apical) del diente. Unos odontólogos de RUDN University realizaron un estudio a gran escala y presentaron la primera clasificación de cambios en la forma del conducto radicular a lo largo de toda su longitud desde la cavidad pulpar hasta el ápice.
"Hasta el momento, la forma del conducto radicular se ha estudiado solo un tercio, ya sea la zona coronal o apical. Pero dicha forma cambia y esto es fundamental para los tratamientos. Por lo tanto, decidimos estudiar cómo cambia la sección transversal en todos los tres tercios del conducto radicular en diferentes grupos de adultos de distintas edades y elaborar una nueva clasificación de cambios en la forma del conducto radicular", expresó Svetlana Razumova, Doctora en Ciencias Médicas, jefa del Departamento de Propedéutica de Enfermedades Dentales, RUDN University.
Los odontólogos de RUDN University realizaron un experimento en el que participaron 300 pacientes de entre 20 y 70 años. Los médicos realizaron tomografías computarizadas de los dientes sanos en proyección axial, esto significa que la radiografía se llevó a cabo a lo largo del eje longitudinal de los dientes. Como resultado, en las imágenes se mostró la sección transversal de los conductos radiculares. Se obtuvo un total de 4805 imágenes y con base en ellas, los médicos investigaron cómo cambia la forma del conducto radicular según el tercio del diente. Los resultados fueron procesados utilizando métodos estadísticos.
Los cambios más comunes en todos los grupos de edad resultaron ser aquellos en los premolares, es decir, los dientes ubicados entre los caninos y los molares grandes. En más del 50% de los pacientes, la forma del conducto en los premolares cambió de redonda en la parte apical a ovalada en la corona. En segundo lugar, se ubicaron los molares de la mandíbula.
Usando los datos obtenidos, los odontólogos de RUDN University elaboraron una clasificación de cambios en la forma del conducto radicular y propusieron dividir todos los cambios posibles en cuatro grupos. El primero: el conducto radicular no cambia su forma, el segundo: la forma cambia en la parte media del diente, el tercero: el conducto cambia de forma en las partes media y apical, el cuarto: la forma del conducto cambia solo en la parte apical. Esta división ayudará a odontólogos a determinar con mayor precisión el estado del canal en cada caso específico y a seleccionar mejor los instrumentos para el tratamiento necesario.
"Nuestros resultados demostraron que la sección transversal de la forma del conducto radicular varía en diferentes tercios del conducto radicular y en los distintos grupos de edad. Hemos presentado estas variaciones en una nueva clasificación. Estos datos deben tenerse en cuenta para escoger una técnica correcta de limpieza del canal. La elección del instrumento y método para la preparación del conducto determinará la efectividad y precisión de esta etapa y, en consecuencia, proporcionará un pronóstico favorable del tratamiento", explicó Svetlana Razumova, Doctora en Ciencias Médicas, jefa del Departamento de Propedéutica de Enfermedades Dentales, RUDN University.
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Applied Sciences