Rellenando una notable brecha en la comprensión de los científicos sobre la forma en que las células responden a los "olores" y señalan a las neuronas subyacentes, los investigadores informan de que los receptores celulares activados hacen que sus células no se disparen sin más, sino que lo hagan en patrones específicos. De este modo, las células con los mismos patrones de disparo terminan conectadas a los mismos grupos de nervios, o glomérulos, del bulbo olfativo del cerebro. De acuerdo con los autores, mediante esta estrategia las neuronas con características superpuestas pueden generar una variación en su capacidad para responder a señales sensoriales relacionadas con el olfato. Varios trabajos anteriores habían demostrado que los receptores olfativos (RO) participan en el "cableado" del sistema olfativo del ratón a través de su actividad de señalización y sus efectos en las neuronas, incluida la neurona receptora del olfato (NRO). Sin embargo, no queda claro si esta actividad revela en realidad el cableado del sistema olfativo del cerebro. En esta ocasión, a fin de investigar el posible papel informativo de la actividad neural en este proceso, Ai Nakashima y sus colegas utilizaron una serie de experimentos in vitro y estudios con ratones en los que modificaron los patrones de actividad neural a través de la optogenética y estudiaron los efectos sobre la expresión de moléculas importantes en el sistema olfativo. Según informan, los diferentes patrones de actividad en las neuronas sensoriales olfativas alteraron la expresión de las moléculas en las terminaciones nerviosas, dirigiéndolas a grupos nerviosos específicos en el bulbo olfativo. La actividad neural parece conducir la expresión de proteínas clave en el sistema olfativo no simplemente impulsando el disparo neural, sino que más bien las características específicas de la actividad neural son importantes para los patrones de expresión génica en este proceso.
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