Buenos Aires, Argentina 13 de octubre de 2016: El consumo de cigarrillos aumenta entre los pacientes con infarto de miocardio en Argentina, según un estudio presentado hoy en el Congreso Argentino de Cardiología (SAC 2016). Estos datos coinciden con un aumento del 100% en la accesibilidad durante la última década, que hizo que el precio de los cigarrillos esté entre los más bajos del mundo.1 Los investigadores también han informado un mejor tratamiento de los ataques cardíacos, pero sin disminución de la mortalidad.
El congreso anual de la Sociedad Argentina de Cardiología tendrá lugar en Buenos Aires del 13 al 15 de octubre. Expertos de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC, por su sigla en inglés) expondrán un programa especial.2
El estudio comparó los factores de riesgo, el tratamiento y los resultados clínicos en pacientes con infarto de miocardio, mediante las encuestas SCAR (2011) y ARGEN-IAM-ST (2015) realizadas por la Sociedad Argentina de Cardiología. El análisis incluyó a 676 pacientes con infarto agudo de miocardio con elevación del segmento ST (STEMI), de los cuales 222 provenían de SCAR, y 454 de ARGEN-IAM-ST. Solamente se incluyó a pacientes de los centros que participaron en ambos registros.
No hubo diferencias importantes entre las dos encuestas en lo que respecta a edad, sexo, diabetes, colesterol elevado o hipertensión. La edad promedio de los pacientes que tuvieron un infarto de miocardio era de 60 años; aproximadamente un 25% eran mujeres, un 20% tenía diabetes tipo 2, aproximadamente la mitad tenían colesterol elevado, y más de la mitad hipertensión arterial.
La cantidad de pacientes con infarto de miocardio que fuman aumentó del 42% en 2011 al 69% en 2015. "La venta de cigarrillos aumentó en Argentina casi un 17% entre 2011 y 2015", afirmó el Dr. Claudio Higa, director de la encuesta SCAR y cardiólogo del Hospital Alemán de Buenos Aires.
"El aumento del precio de los cigarrillos durante la última década fue inferior al aumento de los ingresos, lo que hizo que Argentina fuera uno de los países con los cigarrillos más baratos del mundo", continuó. "Nuestro estudio fue observacional, por lo que no podemos afirmar que esa fue la causa del aumento del consumo de cigarrillos, pero probablemente contribuyó".
El tratamiento del STEMI mejoró entre los dos períodos. La tasa de angioplastia primaria, el tratamiento recomendado, aumentó del 89% al 95%. El uso de agentes fibrinolíticos, la segunda opción de tratamiento cuando la angioplastia primaria no es factible, disminuyó del 11% al 4%.
Con respecto al uso de medicamentos antitrombóticos y antiagregantes antiplaquetarios, el uso bivalirudina aumentó, mientras que hubo una disminución del uso de clopidogrel y de inhibidores de la glucoproteína IIb/IIIa entre los dos períodos.
En cuanto a los resultados clínicos, la prevalencia del shock cardiogénico y de la angina posinfarto se redujo a la mitad en 2015, en comparación con 2011. Sin embargo, no hubo diferencias en las tasas de mortalidad y de reinfarto durante la hospitalización. Aproximadamente del 6 al 9% de los pacientes murieron en el hospital después del infarto de miocardio, y el 2% sufrió un segundo episodio.
El Dr. Higa sostuvo: "El tratamiento del infarto de miocardio mejoró en Argentina, pero lamentablemente esto no se tradujo en una reducción de los casos fatales ni de la repetición del infarto. Es posible que se necesite más tiempo para que el mejor tratamiento muestre sus beneficios, o que el estudio haya sido demasiado pequeño como para mostrar alguna diferencia".
Y concluyó: "Nuestros resultados confirman que la terapia de reperfusión está mejorando en Argentina, así como el uso de medicamentos respaldados por evidencias. También es alentador que la tasa de mortalidad continúa por debajo del 10%, lo cual se compara favorablemente con las encuestas europeas. Hay estudios en curso para realizar un seguimiento de la calidad del tratamiento del infarto de miocardio en Argentina, los factores de riesgo de los pacientes y los resultados clínicos".
El Dr. Raúl Alfredo Borracci, ex director del área de investigación de la SAC, actual codirector de la Revista Argentina de Cardiología y profesor de bioestadística en la Universidad Austral de Argentina, dijo: "Se puede decir que los datos comparativos de SCAR (2011) y ARGEN-IAM-ST (2015) muestran que el tratamiento de reperfusión está mejorando en Argentina, solo si consideramos que la angioplastia de emergencia es una estrategia de tratamiento superior a la fibrinolisis primaria. No obstante, el uso de medicamentos antitrombóticos y antiagregantes plaquetarios parece haber sido ignorado durante este mismo período. Por ejemplo, el incremento del uso de medicamentos nuevos como la bivalirudina no compensó la reducción del uso de clopidogrel y de inhibidores de la glucoproteína IIb/IIIa".
"Si bien los autores no encontraron diferencias estadísticas entre las dos tasas de mortalidad, se debe puntualizar la falta de potencia estadística dado el tamaño de la muestra", añadió el Dr. Borracci. "De hecho, el riesgo de mortalidad del infarto parece haber aumentado un 33% en la encuesta ARGEN-IAM-ST (2015), en comparación con 2011 (riesgo relativo 1,33, intervalo de confianza del 95% de 0,73 a 2,40)".
"Surgen dudas sobre las tasas de tabaquismo, puesto que la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo en Argentina mostró una disminución sostenida a lo largo de 2005 (29,7%), 2009 (27,1%) y 2013 (25,1%) en la población general", prosiguió. "Por lo tanto, es difícil explicar la variación de las tasas de tabaquismo observadas en las cohortes de pacientes".
El Dr. Borracci dijo: "Es bien conocido que las tasas de tabaquismo pueden variar significativamente en épocas de crisis económica o social, pero no creo que esa haya sido la situación en Argentina entre estos períodos. Una explicación más plausible sería la falta de asesoramiento médico adecuado sobre la necesidad de dejar de fumar después de un infarto. Los cardiólogos argentinos deberían enfatizar este aspecto en la atención de sus pacientes".
El profesor Michel Komajda, ex presidente de la ESC y director del programa de la ESC en Argentina, dijo: "El tabaquismo es uno de los principales factores de riesgo para el primer infarto de miocardio y los posteriores.3 La probabilidad de morir de una enfermedad cardiovascular en un período de diez años es aproximadamente el doble para los fumadores. Abandonar el hábito es lo mejor que se puede hacer para reducir el riesgo, además de estar físicamente activo y comer sano".
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Notas para el editor
1Rodríguez-Iglesias G., Ríos B., Shammah C., Schoj V. Estado de situación sobre aspectos fiscales y de accesibilidad del tabaco en la Argentina. Revista Argentina de Cardiología. 2016;84:146-151. http://dx.doi.org/10.7775/rac.es.v84.i2.8149
2Se realizarán sesiones con el cuerpo docente de la ESC el 14 y 15 de octubre
3Guía europea sobre prevención de la enfermedad cardiovascular en la práctica clínica, 2016. European Heart Journal. 2016;37:2315-2381. doi:10.1093/eurheartj/ehw106
Acerca de la Sociedad Europea de Cardiología
La Sociedad Europea de Cardiología reúne a profesionales de la atención sanitaria de más de 120 países, que trabajan para el progreso de la medicina cardiovascular y para ayudar a las personas a disfrutar de una vida más larga y saludable.
Acerca de la Sociedad Argentina de Cardiología http://www.sac.org.ar
La Sociedad Argentina de Cardiología (SAC) se dedica a la formación profesional, la promoción de la salud y la prevención de enfermedades cardiovasculares.